Intervención
de la columna España se estrena con una cirugía experimental contra la
escoliosis
El servicio de Cirugía Ortopédica y
Traumatología del Hospital Universitario Virgen del Rocío ha empezado a
utilizar una nueva técnica para corregir las escoliosis de aparición precoz
preservando el crecimiento de la columna del paciente. La primera intervención
de este tipo realizada en Europa ha tenido lugar el pasado 18 de marzo en
Sevilla y ya ha logrado corregir el 60% de la curvatura anómala de la columna
de una niña de 11 años a quien se le detectó la malformación el año pasado. Se
estima que el resto de la deformidad termine de corregirse a lo largo de este
año.
En la intervención han participado un total
de 15 profesionales, entre ellos especialistas de distintas categorías de las
unidades de Ortopedia Infantil y Columna, Cirugía Pediátrica, Anestesia
Pediátrica y Neurofisiología, según ha informado este jueves la consejera de
Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, junto al jefe
de la Unidad de Ortopedia Infantil del Virgen del Rocío, David Farrington,
acompañados de los padres de la niña Pilar y Antonio.
Farrington ha explicado que la operación de
Fabiana, nombre de la niña natural de Jerez de la Frontera, duró unas cinco
horas, y que tras 10 días permitió que la niña saliera andando del hospital,
"sin muchas molestias, con una evolución más que favorable", precisa.
Para ello, han utilizado la técnica del tirante raquídeo anterolateral, que
consiste en fijar un cordón flexible a diferentes vértebras mediante tornillos
de titanio a fin de controlar el crecimiento de la curvatura de la columna.
Las ventajas de la nueva técnica
"La idea es aprovechar el crecimiento
natural del menor para corregir la escoliosis, de manera que fijamos la parte
que no queremos que crezca (la parte convexa de la curva) y dejamos libre la
que conviene que aumente para compensar la curva y tratar de minimizarla (la
parte cóncava)", ha explicado Farrington, quien prevé que se pueda empezar
a practicar entre seis y siete intervenciones con la nueva técnica al año en
menores con deformidades que no superen los 55 ó 60 grados de curvatura.
Según han expuesto los especialista en la
rueda de prensa, la principal ventaja del nuevo procedimiento es que permite
que el niño intervenido siga creciendo mientras que con las técnicas clásicas,
al fusionar las vértebras del paciente, se puede restar entre cinco y 10
centímetros sobre la talla final. Sin embargo, con esta afirmación no se
muestra de acuerdo Francisco Javier Sánchez Pérez-Grueso, jefe de sección de la
columna pediátrica del Hospital Universitario La Paz, quien señala que
"las técnicas clásicas también permiten el crecimiento del niño". El
mayor inconveniente es que se "requieren varias intervenciones programadas
(dependiendo a qué edad se empiece a operar y el caso particular de cada niño)".
Por otro lado, el especialista de La Paz
subraya que se trata de una cirugía experimental. "Hasta la fecha sólo se
ha hecho en EEUU bajo condiciones muy especiales y aún no se conocen resultados
a medio y largo plazo". De hecho, "en algunos pacientes se ha tenido
que reintervenir por efectos colaterales (por empeoramiento de la
deformidad)". De momento, "se ha hecho en muy pocos casos y lugares
(San Diego, Philadelphia y San Luis)". En Europa, agrega, "se está
esperando a tener más evidencia sobre los resultados para decidir si esta
técnica merece la pena".
Los defensores de la nueva técnica
sostienen que se interviene al paciente a través de tres pequeñas incisiones
laterales, evitando la cirugía abierta de columna. Esto mejora el
postoperatorio, que es menos doloroso y más tolerable para el menor. Las
cicatrices son también más estéticas y suelen pasar desapercibidas ya que
quedan debajo del brazo. No obstante, para Sánchez Pérez-Grueso la principal
aportación, en teoría, de la nueva técnica es que "consigue controlar la
deformidad en una sola operación, algo que aún hay que ver", ya que,
insiste, la técnica es experimental y los resultados a medio y largo plazo no
se conocen aún.
Los especialistas sevillanos señalan que el
nuevo procedimiento, al permitir el movimiento de los discos intervertebrales,
supone la conservación de la movilidad de la porción de columna que se
interviene, circunstancia que no se da con las técnicas convencionales en las
que el tramo de columna operado termina formando un bloque rígido. De hecho,
los precursores de la técnica han constatado en modelos animales la
conservación de los discos, aunque con algunos cambios químicos, celulares y
vasculares.
Sobre cuándo podrán hacer este tipo de
operaciones de forma habitual, Farrington ha explicado que "el principal
escollo que tiene esta técnica es que utiliza la toracoscopia, con el que no
estamos muy familiarizados los cirujanos que hacemos cirugía de columna de
manera habitual". No obstante, precisa que "no es una técnica compleja,
sino que hay que aprender a hacer y entiende que, con su curva de aprendizaje,
está en manos de la mayoría de cirujanos de columna", toda vez que señala
que la cirugía de la corrección de la escoliosis con toracoscopia "se hace
en algunos hospitales, pero no es la habitual".
Una decisión familiar
Pilar, madre de la niña, ha leído una carta
de la propia Fabiana en la que cuenta su experiencia con la escoliosis y el
corsé ortopédico, a la vez que agradece a sus padres haber elegido esta
técnica, y al doctor Farrington y a todas las personas que trabajaron con él lo
que han hecho por ella.
Pilar, por su parte, ha explicado que se
decidieron por esta nueva técnica después de que el doctor Farrington les
explicara todo con detenimiento, y tras tener la oportunidad de contactar con
familias de EEUU, cuyas hijas habían sido operadas con esta técnica, "y
las experiencias habían sido muy positivas". Además, apunta que ella misma
está operada con la técnica tradicional y "ese precio que hay que pagar no
me gustaba que lo tuviera que pagar mi hija", al tiempo que señala que la
niña "ya está en el colegio y está feliz".
Farrington confía en que la corrección de
los pacientes tratados con esta técnica "sea del cien por cien". En
cuanto a Fabiana, prevé que el alta será cuando la niña cumpla los 15 ó 16
años, que es la edad en que se deja de crecer, y le augura un futuro
"normal". El equipo ya ha efectuado una segunda intervención a una
niña de Extremadura, de 12 años. Se trata de un caso similar y la pequeña
también se encuentra de alta en casa. Además, hay otros dos pacientes que se
están pesando si someterse a esta cirugía.